lunes, 23 de mayo de 2011

Trabajo: La publicidad "Las marcas y la enseñanza"



Las marcas y la enseñanza.

Los jóvenes pasan gran cantidad de horas dentro de los colegios por lo que es lógico que las marcas se introduzcan en ellos. En las últimas décadas el mercado de marcas ha visto un gran beneficio llevándolas a los colegios y a las ciudades universitarias ya que los jóvenes son una fuente inexplicable de ganancias por la creación de modas.
En la década de los noventa aún las marcas estaban fuera de las fronteras de los colegios, aunque en mi opinión sí empezaban a crearse modas dentro de las aulas. Lo mismo pasó con las nuevas tecnologías que poco a poco tomaban importancia dentro de los colegios frente a las formas anticuadas de comunicación, así entendían que los alumnos mejoran su aprendizaje y se relacionan mucho mejor. La conclusión es que en ocasiones hay colegios que no pueden con los gastos pero frente al avance los padres y profesores tienen que ceder ya que es importante que los alumnos del sistema educativo sean personas competentes.
Hoy en día no quiere decir que el gobierno no realice acuerdos con los colegios para financiarles los ordenadores y los nuevos aparatos electrónicos sino que también privan a asignaturas como la música y nuestra especialidad que es la educación física. Prefieren dar paso a la promoción de marcas en la cafetería y en los programas deportivos.
Es aquí donde entramos en un debate en donde podemos realizar la pregunta, ¿La enseñanza y crear conciencia de marca a nuestros alumnos es algo que puede ir unido?  En EE.UU al comienzo de los noventa algunas marcas se introdujeron en el sistema educativo a través de anuncios sonoros, los cuales los profesores no podían modificar su volumen y emisión, a cambio los colegios recibían un beneficio como por ejemplo ordenadores, los alumnos dedicaban un tiempo a los textos escolares y otro a las marcas. Estas se podían ver en las cubiertas de los libros de texto o incluso en las cafeterías, cuya comida tenía nombres de personajes de películas y personajes infantiles.
En muchos centros educativos estadounidenses se llegó a tal punto que dentro del colegio se crearon franquicias famosas de comida rápida y los alumnos tenían preferencias por unas o por otras marcas. Al igual que la comida muchas escuelas han tratado de vender en sus centros un tipo de bebida de refresco por encima de las demás creando así una predisposición a los alumnos para su compra fuera de los colegios. Las marcas van acaparando poco a poco todos los espacios de las universidades como por ejemplo vallas publicitarias en los exteriores o en la cafetería, así muchas marcas deportivas se ofrecen a patrocinar determinados equipos universitarios, creando así un colectivo e incluso llegando a surgir una rivalidad entre diferentes marcas.
Todo lo mencionado anteriormente se trata de una fuerte estrategia de marketing de las empresas para que dichos jóvenes en un futuro desarrollen la “conciencia de marca” y por lo tanto sean futuros clientes dando un gran beneficio a las empresas.
Hay puntos de vista diferentes dentro de este debate en donde se dice que una actividad relacionada con las marcas puede despertar un interés en los alumnos y además que le sirva de desarrollo. Por ejemplo en la pruebas de cereales en un colegio consistía en leer, escribir y comparar un producto con el otro por lo que se decía que era bueno para el desarrollo del niño/ a.
Sin embargo son muchos educadores los que opinan que la introducción de marcas en la enseñanza es puro negocio y aprovechamiento de las empresas. El argumento es que se deforman muchos valores fundamentales como son la capacidad crítica para no dejarse influenciar por los demás, la libertad de debate y la protesta pacífica para elegir determinados productos según los gustos de los jóvenes.
Mi punto de vista va del lado de los últimos, los que dicen que las marcas y la educación no pueden unirse o por lo menos mezclarse. Cuando un alumno desde pequeño no puede tomar una decisión a la hora de elegir, o se le está imponiendo un determinado tipo estímulo, consumo o incluso pensamiento; el niño/ a no tiene libertad para elegir y por tanto se le está imponiendo un determinado tipo de rol en donde todos los alumnos vestirán con las mismas marcas, comerán las mismas marcas y serán presos de dichas marcas.
Una gran cantidad de empresas se están aprovechando de unas mentes inocentes que aún no están desarrolladas, así pueden imponer su marketing y conseguir el máximo beneficio. Es triste que un “puñados de ricos” intente cambiar la vida de personas que no tienen posibilidad de elegir, y que piensen que las marcas son  necesarias, pero es una realidad y mientras el ser humano siga siendo egoísta y mirando solo por sus intereses esto no cambiará.
El ser humano debe cambiar, y nosotros los educadores somos los primeros que podemos lograrlo, es complicado y muy llevadero, pero alguien tiene que lanzar la primera piedra para que las personas cambien hacía unos valores. Estos valores no deben estar basados en el consumo y en el beneficio de uno mismo, sino en el respeto, la igualdad y en la libertad de expresión e ideas por encima de todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario